Facebook sugiere aplicaciones que es mejor no aplicar (y así no ganar enemigos)

Soy usuaria de Facebook pero no una fanática. Utilizo esta red con dos fines: ponerme en contacto con amigos que están lejos, mantenerme comunicada sin hacer mucho barullo con los que están cerca, y hacer visibles mis trabajos periodísticos (me resulta más práctico que LinkedIn, pese a que también la empleo). De modo que uso apenas algunas aplicaciones, juego a algunos quiz divertidos y no mucho más que eso. Pero hace unos días apareció arriba a la izquierda una aplicación que resultaba atractiva por lo práctica que se mostraba: "Agrega amigos de manera automática", decía la frase, más o menos (no es textual porque no la recuerdo). Y me mostraba a los contactos que la habían utilizado. Me dije que sería muy práctico hacerlo de esa manera y llevé el mouse hasta la frase en cuestión e hice click. Y caí en la trampa.

Al principio, todo parece muy bien. Aparece un listado para marcar contactos con los que, pareciera, uno se relaciona frecuentemente a través de su casilla de e-mail o webmail y los sugiere, y uno va marcando a aquellos que quiere sumar a su red de contactos en Facebook.

Cuando eso termina, en vez de enviar las invitaciones a ese listado que uno definió, aparece otro listado -el que incluye a todos, tooooooooodos los contactos que uno tiene en su casilla electrónica- pero uno cree que es el mismo que ya marcó. Como uno está apurado, no mira demasiado y, abajo a la izquierda, aparece otra vez el botón "Enviar", va directo y aprieta. Acto seguido, aparece un nuevo cartel que dice, más o menos, "Has enviado NN invitaciones a todos tus contactos de ..." Gmail/Yahoo/MSN, según sea el caso.

Es decir, que Facebook no sólo le envió una invitación a los que yo, concienzudamente marqué para sumar, sino que le envió a todos los contactos que yo tenga en mi casilla de mensajes por más que no me interese sumarlos a la red. Y lo hace de una manera, por lo menos, tramposa porque debería ser más claro en dividir ambas operaciones porque son dos.

Al ratito nomás, recibí llamadas y mensajes de amigos que ya tenía en la red y que me preguntaban si era yo la que les estaba pidiendo ser amiga ¡otra vez! cuando "Andrea, si ya somos amigas", me decían, con sentido común.

Ahí advertí mi error y la trampa de Facebook. Así que, seré más cuidadosa aún cuando quiera aprovechar alguna aplicación que me resulte atractiva. Especialmente cuando haya involucrado un envío masivo que, para muchas personas y para muchos casos, es una cosa muy poco seria.