Aura ha sido el místico nombre que eligió Motorola para bautizar a uno de sus modelos más sofisticados, que llegará al mercado argentino durante el primer trimestre de 2009. El foco de este equipo está puesto en el diseño, que se destaca por presentar una pantalla redonda, emulando a los viejos relojes de nuestros abuelos. Y el punto aquí es que el soporte de este modelo fue diseñado en Suiza, como para que no queden dudas de lo que se ha pretendido buscar con él.
Se abre girándolo sobre su eje, por decirlo de algún modo, como si fuera un abanico, para ser vulgar. Y aunque esto parece nuevo, no lo es, ya Kyocera hace varios años lanzó teléfonos con este sistema, de abrir hacia el costado, girándolo sobre esa pantalla redonda-reloj simultáneo.
Es un teléfono móvil de altísima gama por su diseño y los materiales con que ha sido fabricado, a saber: una pantalla de cristal líquido que deja ver imágenes como si se tratara de una fotografía, y una lente de cristal de zafiro de 62 quilates de primera calidad que evita que el cristal se raye. La superficie de acero inoxidable fue esculpida, electro pulida y pulida a mano para que resista el paso del tiempo sin dejar señales.
En la parte posterior es posible ver el funcionamiento mecánico del reloj que se convierte en pantalla en el frente. Para que la apertura del teléfono móvil se realice sin inconvenientes se recurrió a la misma tecnología que se aplica en las aberturas de las puertas de los automóviles de lujo. Aunque no lo parezca, todo esto demandó un trabajo de ingeniería que, por lo general, se aplica a productos de gran tamaño pero que, en este caso, se dirigió a un teléfono móvil. A esto se suma la protección de partes que Motorola viene incluyendo en sus últimos modelos y que preserva a las distintas piezas de las condiciones adversas.
En cuanto a lo tecnológico propiamente dicho es poco lo que se sabe: posee tecnología Bluetooth stéreo para recibir llamadas con auriculares compatibles y sin cables, además de la Crystal Talk que reduce el ruido ambiente y, así, el que llama a alguien que tiene un Motorola y atiende en medio de una fiesta casi no advertirá esa situación. Cuenta con 2GB de memoria interna, suficiente para guardar imágenes y canciones -porque también posee un reproductor de música y video en diversos formatos- y una cámara de 2 megapíxeles. Incluye un navegador para acceder a internet y también la posibilidad de conectarse por medio de correo electrónico.
Es livianito: pesa 141 gramos pero el precio al que, se estima, se venderá, pesa un poco pues lo que ha trascendido es que costará unos u$s2.000. Parece mucho pero no es para todo el mundo, es un modelo de lujo. Habrá que ver si la crisis ayuda a las operadoras locales a dar algún tipo de subsidio o, para tenerlo, habrá que dejar un ojo de la cara o, tal vez, alguna otra parte del cuerpo.
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