Cablevisión logró antes de lo previsto para este año poner en marcha el sistema de Pay Per View (PPV), es decir, pagar para ver, o mejor, una especie de videoclub on line que ofrece, además de películas, fútbol y productos para adultos (eufemismo por pornografía). Como se trata de un servicio que se puede ofrecer por las redes digitalizadas sólo está disponible para aquellos que cuenten con el servicio de Cablevisión Digital que vivan en Capital, GBA, La Plata, Zárate, Córdoba, Rosario y Santa Fe.
Habrán once canales de películas, dos de contenido adulto (Venus y Private) y los partidos de fútbol del torneo Cablevisión.
El funcionamiento del servicio también es sencillo porque la película se contrata en un período de tiempo predeterminado, por canal y por día y se puede ver durante todo ese día, hasta las 6 de la mañana. Para solicitar la película o el producto en cuestión elegido se puede mandar un mensaje de texto al 11211 con el canal que se quiere ver y el número de cliente, o bien, ingresando a la página web de Cablevisión, o bien por teléfono, llamando al 0822 122 2778.
Puerta a la competencia y víctimas a la vista
Con la puesta en marcha del servicio PPV comienza a ponerse linda la competencia entre las operadoras de telecomunicaciones y Cablevisión. Porque, por un lado, las telefónicas, como Telefónica y Telecom, arrancaron con una oferta de servicios triple junto a DirecTV, la primera en la zona sur del país, la segunda en el área norte. Así, Telefónica ya ofrece su propuesta Trío (banda ancha y telefonía junto con la televisión de DirecTV) en Bariloche y Mendoza, y Telecom hace lo propio también con DirecTV en Salta. En ambos casos, con precios promocionales para acceder a los diversos servicios siempre que se contraten en simultáneo y que no se registre morosidad. Y la pionera en esto del PPV fue DirecTV.
Ofrecer PPV es también la manera que tiene Cablevisión de llegar a su área de influencia más importante con un nuevo servicio, pese a que aún no tiene la chance de ofrecer telefonía ya sea porque no logra las autorizaciones correspondientes en la Secretaría de Comunicaciones (SeCom) o porque aún faltan limar ciertos detalles técnicos para ofrecer la prestación con calidad.
De todos modos, lo que aquí hay que ver es que de uno y otro lado continúan preparándose para la competencia que abrirá a futuro el triple play, para el que falta aún una ley nueva (la de Servicios de Comunicación Audiovisual) que habilite el juego por igual entre todas las compañías, telefónicas y cableoperadoras. En el medio, otros dos sectores recibirán una estocada cuasi mortal: por un lado, las cooperativas que no pueden dar televisión por cable y que con el avance de las grandes empresas tienen cada vez más dificultades para competir y brindar mejore propuestas de servicios; y los videoclubes, de barrio o de cadena, que verán nuevamente afectadas sus ventas por la posibilidad que tienen los usuarios de contratar películas a través de sus operadoras de televisión paga.
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